Inteligencia Financiera: No es difícil, solo hay que empezar
¿Te han hecho sentir que las finanzas son complicadas?
¿Que entender el dinero es solo para contadores, economistas o genios de Excel?
Yo también lo pensé. Hasta que un embargo por más de $70,000 me obligó a despertar.
Ese día entendí algo que nadie me había enseñado: el dinero es un juego que dura toda la vida.
Y como todo juego, puedes aprender sus reglas…
O puedes ignorarlo y perder, por default.
¿Qué es la inteligencia financiera?
No es saber de bolsa.
No es tener miles en el banco.
Tampoco es memorizar términos raros.
La inteligencia financiera es la capacidad de tomar buenas decisiones con el dinero que tienes hoy.
Así de simple.
Implica:
Saber cuánto ganas y cuánto gastas (sí, así de básico).
Tener un plan para tus metas.
Evitar deudas que te ahogan.
Aprender a hacer crecer tu dinero.
Y sobre todo… tomar el control.
¿Por qué parece difícil?
Porque nadie nos lo enseñó.
Ni en la escuela, ni en casa, ni en la universidad.
Y mientras tanto, crecimos escuchando frases como:
“El dinero no crece en los árboles”
“Más vale pobre pero honrado”
“El que ahorra es tacaño”
Frases que programan miedo, culpa y desconfianza hacia el dinero.
Pero la verdad es esta: el dinero no es malo, ni bueno. Es una herramienta. Y si no la sabes usar, te lastima.
Lo que cambió mi vida: aprender
Cuando me vi al borde del colapso, decidí entender cómo funcionaba el dinero.
No para volverme rico, sino para no volver a sentirme preso del estrés, la deuda y el caos financiero.
Aprendí desde la vida real. Desde los errores. Desde los aciertos. Y luego lo complementé como coach certificado.
Comencé a aplicar cambios simples, uno por uno.
Y todo empezó a cambiar.
Hoy, después de 9 emprendimientos, liderazgos gremiales y años de experiencia, vivo sin deudas, invierto con intención y trabajo por un legado, no por dinero.
¿Y tú? ¿Por dónde podés empezar?
Te lo resumo en 3 pasos simples:
Toma conciencia: ¿En qué punto estás? ¿El dinero te da paz o estrés?
Aprende lo básico: No necesitas ser un experto. Solo entender las reglas mínimas del juego.
Acompáñate de alguien que ya caminó el camino: Alguien que no te juzgue, que te guíe, que hable tu idioma y haya vivido lo que tú estás viviendo.
Conclusión: Tú también puedes
No necesitas un MBA.
No necesitas ganar miles.
Solo necesitas tomar la decisión de empezar.
La inteligencia financiera no es un talento. Es una habilidad que se construye con intención y paso a paso.
Y si yo pude —desde la escasez, la deuda y el dolor— tú también puedes.
👉 Empieza hoy. El juego ya comenzó. Y tú mereces ganarlo.
